sábado, 28 de marzo de 2009

28.

Pasada la medianoche se alza un grito al cielo;
consume y desgarra mi alma un ruego.
He visto la sombra renacer desde dentro…
cúbreme entera la lluvia, se convulsiona el viento.
Se baña en mí la luna y tiñe níveo mi cuerpo,
se corrompe el corazón y se pudre el sueño.


















Paréceme descender directamente al infierno
de tus ojos negros, de tus labios muertos
mientras se filtra la ponzoña por mis venas
y se me escapa la vida entre los huesos.
Quédese así al limbo atado un último latido
como a mi cuello tu marca, el beso de vampiro.

3 comentarios:

  1. escribes mui bien!

    tu musica de fondo...muuui buena!

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  2. Qué profundo... el beso de un vampiro :P

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  3. El problema es que no cuente conmigo, ese es el dolor.
    Sobre lo de tu escrito... me encantó. Sigue así Dama Blanca :). Un beso.

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